Conclusión en reunión de FORMACIÓN PERMANENTE de los directivos de las Escuelas de las Hermanas Franciscanas de Gante, realizada los días 24 y 25 de marzo de 2.008 en Paraná- Cristo Redentor . Se redactó este DECÁLOGO fundamentado en la lectura de la participación de todas las escuelas que integran la COMUNIDAD en MISIÓN COMPARTIDA se plasmó en estas valoraciones trascendentes:
- Encontrarnos a diario con el Evangelio.
- Valorar al otro como hermano.
- Celebrar los logros del otro.
- Reconocer el error.
- Saber pedir perdón.
- Ser respetuoso y cordial.
- Cuidar la vida del entorno porque formo parte de él.
- Servir con alegría.
- Respetar los bienes comunitarios como propios.
- Recrear la esperanza.
- Valorar la diversidad.
- Dialogar para vivir en COMUNIÓN
- Asumir la sencillez y la frugalidad como opción de vivir.
- Ser agradecido.
Se presentó a los docentes en el día Institucional haciendo una reflexión de como de logró y se les pidió a los docentes presentar el DECÁLOGO en grupos y la dirección estaría esperando la sugerencia de su aplicación por valores que todavía faltan profundizar como ejercicio constante para cumplir y vivir nuestra MISIÓN COMPARTIDA impregnado por el CARISMA DE LAS HERMANAS FRANCISCANAS de Gante.
1 comentario:
Soy ex-alumna (desde hace bastante tiempo) y la verdad que es fantástico que las chicas hayan podido armar este blog de la Institución, una idea espectacular.
Cuántos sentimientos y recuerdos hicieron que surjan: el mástil en el centro de un enorme patio de ladrillos rojos, rodeado por galerías con macetones cargados de malvones, el sonido de la campana indicando el inicio y fin de los recreos y la hora de formar para regresar a casa...
Y también aquellas MAETRAS (Daniela, Ofelia y Marta saben porqué escribo con mayúscula) como la Heraman Bernarda mi maestra de Jardín de Infantes que funcionaba donde hoy está la sala de maestros; la Señorita Silvia (de primer grado), en segundo la Señorita Vita (o ¿Bita?)la Señorita María (de tercer grado y abuela de Daniela), en cuarto la Señorita Betty, 5to y 6to, las Señoritas Rosamel y Margarita.
Continuando luego los pasos por la ILI.
¿Qué puedo decir de esta Institución que marcó una de las etapas más importante de mi vida, y que luego siguío formando a mis cuatro hijos? - aún me queda la más chica en 5to año, mi último año como mamá de una escuela en la que comencé siendo alumna -. ¡Cuántos años pasaron! Lenta y rápidamente, pero las huellas se marcaron de manera muy profunda y que de vez en cuando, en momentos y oportunidades como estas salen a la luz para decir solamente: GRACIAS, a aquellas maestras, Mis MAESTRAS, y a las que me ayudaron a conducir a mis hijos (Alejandro, María Jesús, María Valentina y María Alba)por el duro pero hermoso camino de la vida. Y también GRACIAS a las que hoy están cumpliendo con esa GIGANTESCA Misión de ser MAETRAS.
Doy GRACIAS a DIOS por permitir hayan estado en mi camino...
FELICES 100 AÑOS.
Cristina.
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